Puntaje: 93
Rojo bermellón con ribete ciruela. Bien concentrado e intenso. Profundo.
Pimienta, cuero y leve herbal son las notas distintivas en nariz.
Ingreso con buena dulzura y muy buena acidez. Repite todas las notas de nariz, donde el herbal funciona como «nervio» del vino, que sirve para sostener su estructura. Llamativamente, sus finos taninos están redondeados, sedosos. De volumen medio alto y muy buena persistencia. Aparecen moras maduras, que unidas a las sensaciones descriptas, lo hacen un vino muy fino. Es tan agradable en la boca que pide más, algo bastante complicado de lograr en estas cepas. A pesar de no tener crianza en barricas de roble, es completo per se.
Grandiosa revelación entre los nuevos vinos de Argentina, en un corte de variedades que no es habitual aunque va de maravillas, en proporciones exactas, donde no predomina ninguno de ellos y se potencian.
Las uvas provienen de un pedregal que ha sido lecho de río, en la zona del Alto Río Mendoza.
Otra vez Federico Benegas Lynch logra llamar la atención con uno de sus vinos. Son muy pocas botellas, habrá que asegurarse acaparar algunas.
Sólo se vende en bodega y en Espacio Benegas de Buenos Aires.
Cantidad de botellas: 1900
Viñedos: Cruz de Piedra, Maipú. Mendoza Cabernet Franc con material genético de las implantadas en 1899, y el Cabernet Sauvignon, también con material genético pero de las implantadas a principios del Siglo XX
Crianza: no. Elaborado en huevos de concreto
Alcohol: 14,5°
Precio: $ 1.980